viernes, 30 de julio de 2010

CAÑA CON RUDA

Hay un viejo dicho por la zona, "si pasamos agosto, estamos salvados", al parecer agosto es el mes bravo y con prensa nefasta. Seguramente porque estamos saliendo de los meses más fríos, con bajas temperaturas todavía y pobre, mes anterior al tan publicitado y querido mes de la primavera donde además, todo renace.
La cuetión es que al menos por estos lados, con el afán de pasar agosto, se implementan ciertas tradiciones como la ya conocida por todos los de "acá" (como decimos los entrerrianos)del TRAGUITO DE CAÑA CON RUDA TOMADO EN AYUNAS EL PRIMERO DE AGOSTO. Tan arraigada está al menos esta tradición, que en numerosos bares se regala el traguito y no faltan los lugares de trabajo donde se reparte.
De más está enumerar los beneficios de la ruda que hasta se recomienda plantarla a la entrada de la casa para alejar los males, imagínensela con ruda, proceso que además tiene sus pasos, como por ejemplo, el de colocar las ramitas de ruda dentro de la botella de caña unos días antes para que, llegado el 1ª de agosto, el preparado se encuentre bien concentrado y aporte mejores resultados.
Dice la leyenda popular que si tomás el traguito, no te enfermás de nada y la muerte se va lejos.
No sé la verdad si será cierto, lo que puedo contarles por experiencia es que tomarse un traguito de caña con ruda en ayunas te deja por lo menos contento, contenta en mi caso, por todo el día, lo que no es poco decir en estos tiempos y que el calorcito en la garganta y el resto del cuerpo te acompaña deliciosamente por un buen rato.
Así que, pensamos era bueno compartir con ustedes esta tradición, que incluye una preparación casera, "medicinal" al decir de muchos y que, quién les dice ayude realmente a pasar agosto de la mejor manera posible.
Eso sí, es un traguito solamente, no nos hacemos responsables por cuatro, cinco, seis o más traguitos, porque seamos claros, la cuestión es pasar agosto no tirar hasta diciembre, ¿se entiende?
Abrazos y buen agosto para todos.

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BOLETÍN ELECTRÓNICO AMBIENTAL Nº 47
Hola toda la gente:

Ya entregamos el Boletín electrónico ambiental Nº 47 de los CUATRO GATOS LOCOS y estamos más locos que otra cosa, pensando lo cerca de alcanzar los 50 números que estamos.
Como veníamos hablando de la salud en relación con el medio ambiente y considerando las olas de frío polar que hicieron estragos en el país y en todo sentido, decidimos escribir sobre el frío y los peligros para la salud.
A continuación editorial del boletín.
Si lo quieren, como decimos siempre, solamente escriban su inquietud a nuestro correo: cuatrogatos_locos@yahoo.com.ar y lo recibirán semanal y gratuitamente.


EDITORIAL

La ciudad está queriendo dormir pero no puede, acostumbrada a un ritmo más lento, descansado, de noches largas puertas adentro, se amolda a esta andanada de visitantes que recorren sus callecitas a toda hora con mirada atenta a todos nuestros verdes convertidos a fuerza de invierno en no menos impactantes tonos de ocres y hasta rojizos. La luna se reflejaba anoche plácida en nuestro río Uruguay y podemos entender que la visita hasta nos envidie un poco, somos tan ricos y poderosos en naturaleza, que de a ratos nos cuesta aceptar que ahora todo esto tan magnífico dependa de nosotros y nuestros cuidados.
Sin embargo, esta misma naturaleza nos muestra por estos días su estación más dura para los que menos tienen. El invierno no es cosa de pobres, leí alguna vez. Las bajas temperaturas potencian la pobreza, la panza vacía se siente más, mucho más con el frío y las finas maderas de las casillas apenas si detienen el viento que se cuela a toda costa por las hendijas. El invierno es enfermedad y muerte para muchos. El frío polar que pasa por distintas zonas del país, hace que la nieve esté donde nunca había estado, armando paisajes incomprensibles y casi imposibles.
La lucha desigual se sostiene, la resistencia de los que ni casilla tienen, amparados por puentes, casas tomadas sin puertas ni ventanas, galerías a la noche, es feroz. Todo sirve para el fuego que sostenido, salva.
Mata la ignorancia entonces, el humo encerrado, o muy cerca que asfixia, el fuego que toma impulso y se agarra de los cartones, las finas maderas que encierran y calcinan.
Dice la voz cargada del locutor, que el frío mata, pero que también mata el monóxido de carbono y que se está haciendo una campaña urgente para informar a la gente, dice también el locutor que son muchas las casillas que se han incendiado terminando con las poquísimas pertenencias de familias, dice, casi en un susurro que han muerto quemados varios niños.
Pareciera que en estos últimos tiempos, la naturaleza, sinónimo indiscutible de vida, se relaciona íntimamente con la muerte. ¿Será para decirnos, será para mostrarnos brutalmente su poder? ¿Será para que entiendan aquellos que no creen sino lo que pueden ver?
¿Será que los tiempos que pensábamos extensos, se van acortando y tenemos que aprender rápido o simplemente morir?
Mata el frío, mata el humo, mata el fuego, matan los químicos que contaminan, mata el capitalismo desesperado por no rendirse…cambian las variables, pero hay una constante que no perdona, que debería enseñar y al parecer no alcanza.


Poli Echevarría

domingo, 11 de julio de 2010


COMIENZO DE SEMANA

Y aunque parezca mentira otra semana comienza. Aunque parezca mentira digo, porque más allá de lo pasado por todos durante el fin de semana, aunque queramos que el tiempo se detenga o al menos no vaya tan rápido, el sigue su marcha implacable.
Y nos quedamos con un lunes entre las manos y muchos debería haber...este fin de semana. Y casi como sin darnos cuenta, descubrimos que estar atentos es esta hermosa cuestión de estar bien presentes en el presente, algo tan simple como decía un maestro. "Estar atentos es leer cuando leemos, comer cuando comemos, hablar cuando hablamos", es en todo caso hacer una cosa por vez, concentrados, disfrutando de ese momento que no volverá jamás. Entendiendo, que vendrán momentos parecidos, similares, casi idénticos, pero nunca el mismo.
Tal vez este lunes. solamente para probar, en lugar de salir corriendo para el trabajo, estaría bueno esto de hacer una respiración bien profunda, acompañarla con el deseo de hacer de este día el mejor, porque como decía Serrat, hoy puede ser un gran día...y vale la pena intentarlo con todas las ganas, con fe, con confianza, porque todo lo que queremos de corazón está ahí para nosotros y porque, carajo, que vale la pena estar vivos.
Una hermosa semana para todos.
Poli
por
Los Cuatro Gatos Locos

lunes, 5 de julio de 2010


El decrecimiento es el futuro

No podemos seguir produciendo a costa de los recursos limitados del planeta, de los ciudadanos del Tercer Mundo o incrementando el cambio climático. Decrecer es necesario y supone un cambio de valores, como desarrolla Carlos Taibo en su libro 'En defensa del decrecimiento' (Editorial Catarata).

Por Carlos Taibo *

-La crisis existente se centra en la economía, pero no es la más importante a la que asistimos. ¿Qué hay más allá del descalabro financiero?
-Creo que hay como poco otras tres crisis importantes. La primera se llama cambio climático, que es un proceso ya activo que no tiene ninguna consecuencia saludable. La segunda es el encarecimiento inevitable en el corto y medio plazo de la mayoría de las materias primas energéticas que empleamos, y la tercera y ultima, por dejar las cosas ahí, es la sobrepoblación que afecta a buena parte del planeta. La crisis financiera es la única que interesa a nuestros medios de comunicación y a nuestros gobernantes y creo que se ha traducido en un retroceso visible en el tratamiento de las otras tres. Algo que me aconseja concluir que el escenario es realmente muy delicado.

-¿Por qué afirma que "desde la economía oficial se confunden interesadamente crecimiento y bienestar" y por qué considera falsa esa afirmación?
-Uno de los grandes mitos de la economía oficial es el del crecimiento. La economía oficial dice que el crecimiento genera cohesión social, que facilita el asentamiento de los servicios públicos y que dificulta el aumento del desempleo y de la desigualdad. A mí me parece que sobran las razones para cuestionar todo esto. El crecimiento económico no provoca necesariamente cohesión social, y se traduce a menudo en agresiones medioambientales literalmente irreversibles, facilita el agotamiento de recursos escasos que no van a estar a disposición de las generaciones venideras y nos sitúa en un marco de un modo de vida esclavo que nos aconseja concluir que seremos más felices cuantos más bienes acertemos a consumir. Todas estas "verdades" merecen ser cuestionadas hipercríticamente.

-¿Qué efectos negativos planetarios ha tenido el crecimiento del mundo occidental?
-El crecimiento del mundo occidental se ha traducido en dos circunstancias importantes que tienen que ver, no ya con el crecimiento, sino con el propio capitalismo. La primera nos habla de un sistema incapaz de resolver los problemas vitales de la mayoría de los habitantes del planeta. Y la segunda se refiere al despliegue de procedimientos de agresión contra la naturaleza que ponen en peligro la vida de la especie humana y de las demás especies. Con ello no estoy afirmando que en todo momento el crecimiento haya sido un factor negativo.

-Asegura que "el crecimiento en los países del Norte propicia el asentamiento de un modo de vida esclavo", ¿por qué?
-Porque nos invita a concluir que vamos a ser más felices cuantas más horas trabajemos, más dinero ganemos y más bienes consumamos. En el libro me refiero a los tres pilares de esta sinrazón: el primero es la publicidad que nos hace comprar lo que no necesitamos, el segundo es el crédito que nos permite conseguir los recursos aún cuando carezcamos formalmente de ellos, y el tercero y último es la caducidad, los bienes están programados para que dejen de servir en un periodo de tiempo muy breve y nos veamos en la obligación de adquirir otros nuevos.

-Entonces, ¿el decrecimiento trae consigo un modo de vida más libre, basada en el principio de "Trabajar menos para trabajar todos"?
-Al menos puede traerlo. Nos invita a liberarnos de determinadas ataduras y a ser más conscientes de lo que hacemos. La apuesta de quienes defendemos el decrecimiento es generar un escenario en el que trabajando menos, consumiendo menos, y dedicando más tiempo a la vida social, la calidad de nuestra vida se acreciente sensiblemente. Acrecentaría el tiempo dedicado a la vida social, en detrimento del consumo, la producción o la competición. El decrecimiento implicaría la gestación de fórmulas de ocio creativo, acarrearía el reparto del trabajo -que es una vieja demanda sindical que ha ido cayendo en el olvido-, nos obligaría a reducir el tamaño de mastodónticas infraestructuras de transporte y de comunicación, permitiría un vuelco sobre lo local en vez de sobre lo global y reclamaría una relación de simplicidad voluntaria y de sobriedad que creo que cada vez falta más entre nosotros. Lo que tenemos que hacer desde el principio es preguntarnos si la vida que llevamos en sociedades marcadas por el trabajo y por el consumo es realmente la vida que nos gusta.

"El crecimiento del mundo occidental se ha traducido en dos circunstancias: un sistema incapaz de resolver los problemas de la mayoría de los habitantes del planeta, y unos procedimientos de agresión contra la naturaleza que ponen en peligro la vida de la especie humana y de las demás especies"

-Eso supone un importante cambio de mentalidad...
-Claro. Más que dificultades técnicas o tecnológicas en el decrecimiento -que no las aprecio, y en cualquier caso serían menores que las vinculadas con los proyectos de crecimiento-, creo que lo que implicaría sería un cambio de chip mental que tendría que ser radical. Aprender a relacionarnos con los restantes seres humanos y con la naturaleza de manera diferente.

-Pero, ¿cree que las empresas dejarían de producir por sí mismas, a menos que los ciudadanos dejemos de consumir?
-Creo que deberíamos dejar de consumir por un lado, y por otro ejercer presión para que aquellas empresas que se dedican a producir bienes lesivos para la naturaleza dejen de hacerlo. En cualquier caso nuestra apuesta tiene que ser por cerrar parte de la actividad en industrias como la automovilística, la militar, la de la aviación, la de la construcción o la de la publicidad, por proponer cinco ejemplos. Alguien se preguntará, ¿qué hacemos con los millones de trabajadores que en la UE quedarían en desempleo de resultas de lo anterior? Pues por un lado colocarlos en una economía social y medioambiental que tiene que tomar mayor protagonismo, y por el otro repartir el trabajo en los sectores económicos que permanecerían sobre el terreno.

-¿El dinero tiene que volver a tomar cariz humano, social y medioambiental?
-Supongo que a la larga nuestro propósito sería abolir el dinero, pero si en sociedades complejas tenemos que seguir utilizando estos instrumentos, en efecto, habría que dedicar no ya al dinero, sino al conjunto de las actividades económicas, una dimensión social y medioambiental mucho más grande de la que tienen hoy.

-Afirma que hay un tiempo para cambiar, que "si no decrecemos voluntariamente y racionalmente tendremos que hacerlo obligados por las circunstancias de carestía de la energía y el cambio climático". ¿Qué supone hacerlo en uno u otro caso?
-Es claramente preferible -ya que tenemos que decrecer porque el planeta tiene sus límites-, hacerlo de manera consciente, racional, solidaria, social y ecológica, y no aguardar a que el capitalismo global que padecemos se desfonde y genere un caos de escala planetaria que por fuerza llevará aparejado un sufrimiento dramático para la mayoría de los habitantes del planeta. Creo que al final ese es el mensaje central, que empleo en el libro.

FUTURO Y REPRESIÓN

-Ante la crisis, ¿cuáles son los posibles escenarios futuros?
-Yo manejo dos escenarios distintos. Uno nos habla de un aumento de los movimientos de contestación, que probablemente van a ver cómo muchos de los mensajes aparentemente radicales que emitían, van a encontrar un mayor caldo de cultivo. El otro escenario lo llamo darwinismo social militarizado, y son fórmulas que recuerdan poderosamente a muchas de las políticas que abrazaron los nazis alemanes ochenta años atrás. Implican que desde algunos de los principales estamentos del poder político y económico -conscientes de la escasez general que se avecina- se decida preservar esos recursos escasos en provecho de una escueta minoría de la población planetaria, de la mano de proyectos por fuerza violentos.

"Tenemos que preguntarnos si la vida que llevamos en sociedades marcadas por el trabajo y por el consumo es realmente la vida que nos gusta"

-¿De qué dependerá que se viva una u otra opción?
-En buena medida de nosotros, de nuestra lucidez a la hora de ser capaces de modificar las reglas del juego, de plantear en serio a los dirigentes políticos horizontes distintos de los que ellos mismos están defendiendo ahora. Eso sería ahora que tenemos tiempo, aunque empieza a faltarnos. De cualquier manera hay algunos datos incipientes que demuestran que los ciudadanos de a pie empiezan a percatarse de la sinrazón de nuestra actual forma de vida.

-Centrémonos en el segundo escenario. ¿Son posibles las revueltas de una sociedad descontenta, que quiere mantener sus privilegios y estado económico y expulsa a los más pobres e indefensos?
-Creo que es perfectamente creíble que en ese escenario de darwinismo social militarizado se produzca lo que tú estás sugiriendo, y en realidad sospecho que muchas de las políticas que empiezan a emerger en los países ricos hunden sus raíces en proyectos de esa naturaleza. No es estrictamente preciso hablar de revueltas. Si uno presta atención a las nuevas leyes sobre inmigración que está aprobando la aparentemente civilizada UE, estará obligado a concluir que algo de esto se está cociendo.

-¿Por qué estamos tan convencidos de que no se repetirán las soluciones tomadas por el nazismo, donde una parte escogida de los ciudadanos se alzaron con los recursos, privando a otros de ellos?
-No estamos tan convencidos, porque el riesgo de retornos autoritarios está presente en nuestras sociedades y que ese riesgo se acrecienta en escenarios de crisis. Los políticos y medios de comunicación quieren que creamos que el fin de la crisis está cerca, pero es un procedimiento de manipulación que se encamina a conseguir que los ciudadanos no se hagan las preguntas de fondo. El procedimiento acabará por chocar con la realidad. Tenemos que empezar a cuestionar la idea de que nos hallamos ante un capitalismo que registra crisis cíclicas. Sospecho que no va a haber ninguna etapa de bonanza en el futuro, a menos que cambien drásticamente las reglas del juego, algo que no aprecio en ninguna de las medidas contra la crisis que abrazan nuestros gobernantes.

"Ante el recrudecimiento de la crisis habrá dos escenarios distintos. Uno es el renacimiento de los movimientos de contestación. El otro son fórmulas que recuerdan a muchas de las políticas que abrazaron los nazis alemanes ochenta años atrás"

-El miedo de los propios ciudadanos alemanes les convirtió en seres entregados y obedientes. Fue un miedo creado artificialmente por Hitler y afines. ¿En qué puede desembocar unos ciudadanos con miedo a que los inmigrantes les quiten el trabajo, a no tener qué comer, a perder su bienestar...?
-En primer lugar en actitudes visiblemente hostiles y castigadoras frente a las minorías foráneas que están presentes en nuestros países. Creo que este es un dato fundamental. Has mencionado una palabra decisiva: miedo. Lo que creo que va a ocurrir es que nuestros gobernantes van a intentar amedrentar a la ciudadanía de la mano de mensajes del tipo "si quieren ustedes conservar una parte de sus privilegios,acepten sin rechistar el conjunto de restricciones de derechos que vamos a intentar desplegar los gobernantes".

-¿Podríamos incluso asistir a la extinción democrática?
-Es uno de los riesgos que está en el horizonte, o en su defecto una reducción dramática de nuestros derechos justificada legalmente sobre la base de procedimientos aparentemente democráticos. Creo que este es un horizonte perfectamente creíble en los países democráticos.

-¿Cuál es su propuesta alternativa? ¿Necesitamos volver a una conducta colectiva, creando un movimiento en favor del decrecimiento?
-Tenemos necesidad de hacerlo, pero tenemos también la obligación de modificar nuestros hábitos cotidianos. Creo que una de las ideas del pasado que conviene cuestionar es la de que sólo vamos a transformar esto si actuamos de manera colectiva. Tenemos que actuar colectivamente, pero difícilmente vamos a modificar las cosas si en nuestra vida cotidiana no somos capaces de introducir esos valores que reivindicamos para el futuro

* Profesor de Ciencia Política en la UAM

Ante la aparición de basureros clandestinos

El Municipio de Colón solicita a los vecinos no arrojar basura en baldíos

Desde la Secretaría de Obras Públicas de la Municipalidad de Colón se solicita a la población que no arroje basura en lugares indebidos. El cronograma de recolección de residuos funciona con normalidad, por lo que se pide respetar los días y horarios de este servicio. Personal de esta dependencia estuvo trabajando en calle Cabo Pereyra entre Alberdi y Horne, donde se localizaron varios puntos en terrenos baldíos, donde vecinos de nuestra ciudad han utilizado como basurero. Recordamos los días y horarios del servicio de recolección domiciliaria de residuos: lunes, miércoles y viernes desde la hora 5 por calles perpendiculares a 12 de Abril; y martes, jueves y sábados desde la hora 5, por calles paralelas a 12 de Abril.

Buenas a todos. Antes de continuar con esta entrada, haré una aclaración que vale. No soy partidaria de la Intendencia de nuestra ciudad, en realidad hace muchos años me declaro independiente respecto a la política partidaria y libre pensante, lo que me trae no pocos inconvenientes, pero, he aprendido que si se pretende hacer un periodismo medianamente objetivo (nunca lo es en un cien por ciento ni mucho menos) la independencia de criterios y en cuanto a las afiliaciones, viene bien.
Desde este lugar digo, que la Intendencia de nuestra ciudad no es para saltar por los aires de felicidad, pero tiene sus cosas buenas, y que en particular, en este caso, tiene razón.
Tomé este comunicado de prensa municipal de nuestra ciudad, porque me pareció es un ejemplo más que claro sobre lo que decimos siempre, el medio ambiente no es solamente responsabilidad del gobierno de turno ni mucho menos, es responsabilidad de cada uno. Porque si bien es cierto los Gobiernos, desde los diferentes estamentos tienen el poder de negociar y decidir, aclaremos,la mayoría de las veces arbitrariamente para con el pueblo, también es cierto que cada uno de nosotros tiene la responsabilidad de hacer por el medio ambiente lo que esté a su alcance y el derecho de cuidarlo, preservarlo y defenderlo(lean, por favor, la Constitución).
Es inentendible lo que hace mucha gente aquí en Colón, Entre Ríos y que dá lugar a este pedido desde el Municipio. Es cierto que los camiones recolectores realizan puntualmente su recorrido, pero es ya como una tradición esto que hacen los vecinos y que ningún Gobierno municipal pudo erradicar, no sólo de tirar basura en los terrenos baldíos, sino y además, hasta juntar bolsas de residuos en el baúl de los autos para luego encontrando un terreno desocupado, "revolearlas" con absoluta indiferencia y sin ninguna necesidad. ¿Por qué? Buena pregunta.
¿Es un castigo por los impuestos que se cobran? ¿Castigo a quién, al vecino? Porque a los únicos que se castiga es a los vecinos. Quienes lo hacen, nos castigan con los olores, con la contaminación que se genera, con el peligro que significan para nuestros gurises que por la tranquilidad con que vivimos andan con sus bicicletas y/o todavía con su enorme imaginación jugando por los terrenos baldíos, nos castigan con la mugre y los bichos que allí se juntan y por último nos castigan con las preciosas postales de suciedad que generan...lindas para ofrecer el turismo natural del que, entre otras cosas, muchos viven.
¿Es por política, para demostrar que esta línea del partido es ineficiente? Si es esta la razón, es una verdadera estupidéz, que no admite siquiera análisis.
¿Por qué se hace? Se han filmado los autos, se han tomado las patentes, se han realizado visitas a los vecinos que practican esta actividad, los inspectores han mantenido charlas y han cobrado las multas correspondientes, pero lo siguen realizando.
Es cierto que los camiones vuelcan la basura en basurales a cielo abierto, que se están combatiendo, pero, ¿es ésta la solución? ¿basura, por basura, contaminación por contaminación, ojo por ojo y diente por diente? Imposible de esta manera encontrar un camino alternativo saludable para todos.
Dicen, algunos que estudian las conductas humanas, que el hombre es el único de los seres vivos que mata por placer y que es capaz de matarse a sí mismo. Es terrible que así sea, es temible que la evolución y la salvación del planeta por estos tiempos esté en manos de quienes tienen estas posibilidades.
Imaginensé. Si en esto que es tan pequeño, como simplemente sacar la basura al canastito colocado en la vereda los días de recolección, que además son comunicados cientos de veces, hay quienes actúan sin consideración alguna, ¿cómo hacemos para que se tomen en cuenta, otras actividades que hoy por hoy ya son imprescindibles, como reciclar, recuperar, reutilizar, denunciar los malos manejos en relación a los recursos que son de todos?
Es difícil, claro que lo es, pero no imposible. Habremos, como dije en otras oportunidades, de educar hasta el cansancio...y por favor, no se confunda, tener excelentes ingresos y casi todas las cosas materiales que el dinero pueda comprar, no hace que las personas sean educadas en este tema, bien pueden ser, como de hecho lo demuestran en este caso en particular, absolutamente ignorantes respecto al medio ambiente y su problemática a la que contribuyen sistemáticamente.
Un arenal se construye granito por granito, nuestra casa, la tierra, se mantiene con el pequeño esfuerzo diario de cada uno. ¿Y lo que hacen los Gobiernos? Se denuncia, se manifiesta en forma particular o uniéndose a un grupo ambiental o ecologista, pero desde el vamos, nadie puede pedir lo que no es capaz de ofrecer.
Un abrazo
Poli Echevarría