Cuando los nazis vinieron a buscar a los comunistas,
guardé silencio,
porque yo no era comunista.
Cuando encarcelaron a
los socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata.
Cuando vinieron a
buscar a los sindicalistas,
no protesté,
porque yo no era sindicalista.
Cuando vinieron a buscar a los judíos,
no protesté,
porque yo no era judío.
Cuando vinieron a buscarme,
nadie quedaba
para protestar ya.
Este poema no era de Bertolt Brecht como todos solíamos creer sino de Martin Niemöller (1892-1984) y, de hecho, no era un poema.
No hay comentarios:
Publicar un comentario